Por otra parte, una reacción de fusión ocurre cuando los núcleos de hidrógeno chocan y forman un núcleo más pesado como el helio. Se requiere de más energía para"generar" una reacción de fusión, pero cuando está encendida, el exceso de la energía es mayor a la de una reacción de fisión. Un importante desafío para este tipo de reacción son las increíbles temperaturas necesarias. En la base del Sol, y en los núcleos de todas las estrellas, las temperaturas pueden alcanzar varios millones de grados (para nuestro Sol, la temperatura del núcleo es de aproximadamente, 15 millones de °K, con una densidad diez veces mayor a la del plomo).
Para hacer fusión en un laboratorio, las temperaturas necesitan exceder más de 10 millones de °K. Esto hace que sea muy dificil confinar al plasma. Por otra parte, el combustible es muy abundante. El único combustible requerido en un reactor de fusión es el hidrógeno pesado, el cual se encuentra en el agua de mar, una fuente de energía virtualmente ilimitada. Si la fusión controlada llegara a convertirse en realidad, sería una de las más grandes brechas para la civilización, especialmente para nuestro mundo moderno, donde los seres humanos están buscando fuentes alternativas de energía a base de aceite. Sin embargo, los problemas científicos y de ingeniería asociados a un reactor de fusión, son de gran magnitud.
Podrían ser divididos en tres importantes categorías:
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1. |
Confinamiento (¿Por cuánto tiempo permanece el plasma?) |
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2. |
Calefacción (¿Acaso el plasma llega a ser lo bastante caliente?) |
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3. |
Tecnología (diseño de reactor, siguen habiendo muchos problemas para la investigación futura) |
Escucha qué sucede cuando se enciende un reactor de fusión.
Sonidos cortesía del Laboratorio Nacional Los Alamos
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